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Fe viva

Muchas personas creen saber lo que es el cristanismo, debido a que desde su infancia han estado inmersos en una cultura presuntamente «cristiana», y les han enseñado ciertos dogmas, ciertas normas morales y ciertas prácticas de devoción. Sin embargo, muchas veces su concepción del cristianismo está enormemente distorsionada. Cientos de personas han vivido el cristianismo como una religión opresiva.

Nada más distinto de la verdadera fe cristiana, tal como aparece en los Evangelios y en los demás escritos del Nuevo Testamento. Como cristianos evangélicos, nuestro deseo es presentarte un cristianismo vivo y auténtico, tal como lo predicó Jesús de Nazaret, y tal como lo enseñaron los primeros cristianos. Jesús no vino para crear esclavos, sino para que tengamos vida, y vida en abundancia (Juan 10:10).

Cualquiera que sea tu situación actual, por profunda que sea tu desesperación, tu soledad o tu pecado, hoy mismo puedes comenzar a recibir esa vida en abundancia que Jesús nos prometió. Tal vez te ayude leer lo siguiente:

El Plan de Dios

La fe cristiana afirma que Dios creó todas las cosas. Esto es lo que significa la expresión hebrea “en el principio creó Dios los cielos y la tierra” (Génesis 1:1).
En ocasiones se ha dicho que la teorí­a de la evolución de Darwin contradice la fe cristiana en la creación.

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El Problema del Ser Humano

El mundo que conocemos está atravesado por guerras, injusticias, y opresión. Basta echar una ojeada en torno nuestro para darnos cuenta de cómo el dolor, la falta de sentido, la ira, la tristeza y la falta de perdón afectan y destruyen la vida de tantas personas.

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La Solución de Dios

La solución de Dios consistió en venir él mismo a nuestro encuentro. La Biblia nos narra la historia de los diferentes pasos que Dios fue dando para recuperar la comunión con nosotros. Es lo que podemos leer en los libros del Antiguo Testamento…

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La Decisión es Tuya

Una nueva vida es posible cuando recibimos a Cristo en nuestro corazón, y le permitimos ser el centro de nuestras vidas. En ese momento pasamos a pertenecerle a él, y a ser sus hermanos.
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La Nueva Vida

Cuando recibes a Jesús en tu corazón, te conviertes en un hijo o hija de Dios, y comienzas ya ahora una vida que es eterna. Como dice la Escritura: “todo aquél que invocare el nombre del Señor, será salvo” (Romanos 10:13).
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